Bellas Artes: la experiencia de una docente

Ella tiene a su cargo un total de 45 alumnos, divididos en tres cursos; niños, adolescentes y adultos y manifiesta que la exigencia es para todos por igual aunque asegura que, los trabajos dependen de la edad de quienes lo realizan.
 
 
“Con los chicos la actividad es más lúdica, ellos recién comienzan con la cerámica y al principio las clases se tratan de conocer el material (lo que es la pasta) y cómo es su manipulación”.
 
 
“En un comienzo me costó reunirlos” afirmó, aunque luego mencionó que “el grupo que se formó es muy lindo, ellos no se conocían y ahora tienen una gran pertenencia”.
 
 
En cuanto a los adultos, Sabrina expresó que “cada uno trae la idea y lo que hacemos es profundizar la técnica. Una es modelado, otra el pellizco, y otra el de placas” detalló.
 
 
“La cerámica es barro que luego de modelar se tiene que secar, una o dos semanas para así pasar a la etapa de cocinar: va al horno a casi mil grados de temperatura” explicó.
 
 
Para quienes están interesados en ser parte de las clases, aclaró que “siempre hay mucha gente que se anota y es por eso que recomendamos que estén atentos a los anuncios que se hacen antes de abrir la inscripción”.
 
 
Por último invitó a todos a visitar la exposición que estará abierta hasta el lunes 28 de noviembre en la Casa de la Cultura.