Hoy hay función del destacado film: "El último traje"
Será a las 21 horas en la Casa de la Cultura con una entrada general de 30 pesos.
El Espacio INCAA de Madariaga proyectará hoy en su función de las 21 horas la película “El último traje” donde Miguel Ángel Solá interpreta a Abraham un sastre jubilado de 88 años que tiene una promesa por cumplir. A fines de la Segunda Guerra Mundial un amigo lo salvó de la muerte y juró volver algún día a reencontrarse con él para narrarle cómo fue su larga existencia.
Siete décadas después, sintiendo que para su familia ya es un estorbo y que su destino será un geriátrico, Abraham decide que es el momento de enfrentarse a sus miedos. Su amigo reside en Polonia y ese sastre se propone una épica aventura: cruzar media Europa con la ayuda de algunos personajes que cambiarán su manera de ver el mundo.
Al llegar a Madrid conocerá a un argentino residente allí, a la dueña de un hotel barato y a una alemana que lo hará comprender que no todos los alemanes son nazis, a los que se suma una enfermera polaca que lo acompañará en el último tramo de su trayecto, y todos ellos harán de esta travesía un canto a la esperanza, a la comprensión y a la bondad.
Con trazos cálidos el director Pablo Solarz, que se inspiró en aspectos que lo tuvieron como protagonista, logró así narrar una historia tan tierna como emotiva. En este entrañable film, Miguel Ángel Solá supo dotar a su personaje de seducción y de verosimilitud sin caer nunca en el melodrama. El resto del elenco y los excelentes rubros técnicos se plegaron con emoción a esta trama que habla de una amistad que el tiempo nunca pudo borrar.
Critica: Adolfo C. Martínez.
Siete décadas después, sintiendo que para su familia ya es un estorbo y que su destino será un geriátrico, Abraham decide que es el momento de enfrentarse a sus miedos. Su amigo reside en Polonia y ese sastre se propone una épica aventura: cruzar media Europa con la ayuda de algunos personajes que cambiarán su manera de ver el mundo.
Al llegar a Madrid conocerá a un argentino residente allí, a la dueña de un hotel barato y a una alemana que lo hará comprender que no todos los alemanes son nazis, a los que se suma una enfermera polaca que lo acompañará en el último tramo de su trayecto, y todos ellos harán de esta travesía un canto a la esperanza, a la comprensión y a la bondad.
Con trazos cálidos el director Pablo Solarz, que se inspiró en aspectos que lo tuvieron como protagonista, logró así narrar una historia tan tierna como emotiva. En este entrañable film, Miguel Ángel Solá supo dotar a su personaje de seducción y de verosimilitud sin caer nunca en el melodrama. El resto del elenco y los excelentes rubros técnicos se plegaron con emoción a esta trama que habla de una amistad que el tiempo nunca pudo borrar.
Critica: Adolfo C. Martínez.